martes, 16 de febrero de 2010

Lo siento pero, se me acabó el amor.

Qué se hace cuando le dices a alguien que lo es TODO, y ese TODO se te escapa entre los dedos? La firme convicción de que no es cierto cae como un velo que emborrona la realidad y tus tripas se encogen mientras te acurrucas detrás de la más grande de las mentiras, que él te quiere, que si cierras los ojos todo estará como estaba ayer. Y los cierras, cómo no.. la mente humana es muy ingenua y muy cobarde. Pero lo inevitable llega y el tiempo, veloz, comienza a carcomer esa gran mentira, a destruir tu escondite. La realidad prepotente se abalanza sobre ti, pobre ilusa. Y entonces toca hacer el balance de los daños.

Orgullo? Escondido en el garage.
Dignidad? Robada.
Autoestima? En el subsuelo.
Sonrisa? Olvidada.
Corazón? Roto.

Parece que tu TODO se había empezado a pudrir desde hace tiempo y tú no te dabas cuenta. ¿Qué toca ahora entonces? ¿Recuperarse? No, querida amiga. No es tan fácil. ¿Nunca te dijeron que las penas y las dudas se beben con licores? Esta noche es tuya. Fingirás ser la persona más feliz del mundo. "Por fin libre", dirás si alguien te pregunta cómo estás. Lucirás los tacones más altos y la falda más corta y te venderás al mejor postor, o postores. Intentarás demostrarle al que era tu TODO, que TODO te da por culo y que puedes ser feliz con NADA. Sí, pequeña, esta noche te comerás el mundo. Mañana lo vomitarás. Y dentro de unos meses, tal vez, o incluso algo más, entonces sí, puede que te hayas recuperado. Tu corazón se habrá curado con alcohol, la autoestima habrá conseguido subir al primer piso, el orgullo habrá salido del garaje, la dignidad te habrá sido devuelta por alguna de tus pobres víctimas y la sonrisa, bueno, la sonrisa llegará en cualquier momento.

4 comentarios:

  1. Hay bonita te entiendo un mucho de lo que escribes, algún día estuve en esos tacones tan altos, pero me caí poquito, animo! no dejes que tu todo se vuelva nada... yo aun me recupero, y pues estoy contigo... no estamos solas!!! ni tu, ni yo.
    Animo pequeña, ni el tiempo ni el alcohol curan las heridas... no!... solo el amor lo hace.
    Sigamos... si podemos!


    un beso GRANDE ^^

    ResponderEliminar
  2. Creo que... estamos en la misma situación. Pero yo no sé andar en tacones

    ResponderEliminar

Hablen, opinen y cuéntenme(: